El gobernador Eduardo Verano De La Rosa informó que la emergencia se presentó en 11 municipios donde hubo casas inundadas, calles anegadas, una pared colapsada, árboles caídos y deslizamientos. Los más afectados: Luruaco y Repelón.
En Luruaco, los barrios Limón, Negro, San Felipe, Villa Estadio, Villas de Luruaco, La 50 y El Progreso quedaron 200 viviendas colapsadas y 300 familias damnificadas. En Repelón, 200 familias más resultaron afectadas. En el barrio Villa Rosales de Puerto Colombia, 10 familias quedaron entre el barro. Los muros de contención que habían instalado los ciudadanos para mitigar los daños fueron arrastrados por el barranco.
Similar situación vivieron los habitantes de Santa Lucia, Tubará, Baranoa, Sabanalarga, Usiacurí, Ponedera y el corregimiento de Puerto Giraldo, donde se presentaron diferentes emergencias. “La Gobernación del Atlántico ya está atendiendo las familias y 400 viviendas afectadas en todo el departamento. Se les brinda la ayuda necesaria a través de la Oficina de Gestión de Riesgo que se articula con los organismos de socorro. Desde este lunes estamos realizando el censo y el diagnóstico para actuar rápido como ha sido nuestra constante”, dijo el mandatario.
3000 VIVIENDAS EN ZONAS DE ALTO RIESGO
Respecto a las viviendas ubicadas en zonas de alto riegos en el Atlántico, Edinson Palma, sub secretaria de gestión de riesgo, informó que de acuerdo al censo realizado por las alcaldías de los municipios del Atlántico, 3000 casas están construidas en estos sectores altamente peligrosos, propensas a precipitaciones y deslizamientos.
“En todos los municipios tenemos esta situación de viviendas ubicadas en zonas montañosas, cerca a arroyos y caños y deben ser priorizadas por las alcaldías para que sean reubicadas con el apoyo conjunto de la Gobernación del Atlántico”, puntualizó el funcionario.