Luego de labores de campo realizadas por personal especializado de la SIJIN adscritos a la Metropolitana de Barranquilla y en coordinación con la Fiscalía 41, se logró determinar la existencia de una organización delincuencial conformada por varias personas, la cual se encontraba estructurada jerárquicamente, donde cada una cumplía con una función o rol, para el funcionamiento de la misma.
Durante dos años de investigación en contra de los integrantes de la organización delincuencial ‘Los Secuestres’, se llevaron a cabo recepción de entrevistas, declaraciones juramentadas e interrogatorios que permitieron relacionar a sus integrantes con los delitos investigados.
Después de tener esta información se determinó en las últimas horas la captura de seis personas cuatro de ellas en la ciudad de Barranquilla, una en la ciudad de Bogotá quien es el cabecilla de la organización conocido como ‘Tavo’ o ‘El Patrón’ y una más en la ciudad de Manizales, quienes presentaban orden judicial vigente por el delito de Hurto Agravado ordenadas por el Juez Séptimo penal de control de garantía municipal de Barranquilla.
Esta organización delinquía en todo el territorio nacional, teniendo como área de influencia principal la ciudad de Barranquilla, donde recuperaban los vehículos, para posteriormente distribuir, comercializar y vender los automotores que eran recuperados en cumplimiento a los embargos; se pudo establecer que uno de los integrantes valiéndose de su función desarrollada, descargaba las anotaciones que tenían dichos vehículos, para facilitar su comercialización.
El ‘zar de la estafa de vehículos’ responde al nombre de Gustavo Torres Hernandez de 33 años de edad, conocido como el patrón y jefe de la organización ‘Los secuestres’ presenta más de 450 denuncias por estafa y conexo a nivel nacional, esta persona manifestaba ser abogado y tener poder jurídico para comercializar vehículos de la aseguradora.
En esta misma investigación se logró la captura de cinco personas más, entre estos dos uniformados de la Policía Nacional, continuando con la política de cero tolerancia contra la corrupción, de los cuales uno laboraba en la ciudad de Manizales y otro en Barranquilla.
Las personas capturadas fueron dejadas a disposición de las autoridades competentes para su judicialización.